les comparto de la casa de sirio medellin
La Gran Hermandad Blanca
CASA DE SIRIO
CASA DE MER
EL SISTEMA ESTELAR DE LAS PLÉYADES
Y
LA ESTRELLA ALCIÓN
EL CONJUNTO DE LAS PLÉYADES
En la Biblia se menciona 3 veces, lo enaltece el Mahabharata y es el lugar de origen de su cultura, en la literatura Maya. Pero son los griegos, desde la época de Homero, los que le dieron su nombre a este conjunto de estrellas que se destaca en la Constelación del Tauro. Cuenta la mitología helénica que las 7 hijas del titán Atlas y la ninfa Pléyone, fueron ascendidas al cielo por Zeus el padre de los dioses.
Ha sido tradición que en las noches estrelladas, los padres señalen a sus hijos el bello complejo pleyadino, y les enseñen que su nombre es el de “las 7 Cabritas”. La más luminosa es Alción, seguida por Atlas, Electra, Maya, Merope, Taygeta y Coele. Su extensión como “Conjunto Estelar Abierto” cubre unos 12 años-luz.
LOS SISTEMAS DE SISTEMAS
Según la astronomía sagrada que enseñan los Maestros de la Casa de Sirio-Casa de Mer, la importancia del Conjunto de las Pléyades traspasa su propia dimensión y constituye solamente “el centro” de un sistema estelar mucho mayor y de una trascendencia definitiva para la existencia humana.
Para comprender el significado del “Sistema de las Pléyades” será necesario adentrarnos primero en el principio “Sistemas de Sistemas”.
Este principio dicta: Es ley universal que todo lo que existe está compuesto de sistemas que son parte de otros sistemas más complejos, que a su vez están conformados por otros sistemas más simples. Todo es Sistemas de Sistemas, a diferentes niveles de complejidad hasta llegar al Sistema Mayor que llamamos Universo.
Un ejemplo de la vida diaria y de nuestros conocimientos actuales nos puede evidenciar este principio. Comencemos con el micro-universo intra-atómico. Partículas sub-atómicas, de diferente índole se reúnen sinérgicamente y forman un núcleo atómico mientras otras en su periferia giran a su alrededor. Su conjunción es un sistema que llamamos átomo. Los átomos se reúnen y constituyen otros sistemas más complejos que denominamos moléculas.
Demos ahora un salto y sigamos nuestra disertación en un cuerpo humano. Las moléculas forman células; las células, tejidos; los tejidos, órganos; estos, a su vez, sistemas o aparatos biológicos como el sistema nervioso o el aparato digestivo; los aparatos al unirse, con un objetivo común (como sucede con todo sistema) terminan por crear un organismo, como el humano de nuestro ejemplo.
Continuemos ahora abordando el tema desde la sociología. Los organismos humanos se conjugan en núcleos sociales elementales que son las familias. Las familias forman comunidades, estas países y el gran conglomerado humano como componente ecológico que junto a otros semejantes pero de otras índoles se reúnen en el Gran Ecosistema llamado Planeta Tierra.
Acudamos ahora a la astronomía para concluir nuestro ejemplo de “Sistemas de Sistemas”. La Tierra se asocia con otros planetas y al girar alrededor de una estrella que llamamos el Sol, forman el Sistema Solar. Y aquí viene lo novedoso de la astronomía sagrada, no descubierta aún por la astronomía científica. Una cadena de sistemas estelares es necesaria antes de llegar a ese macro-sistema que denominamos La Vía Láctea.
El hecho es que los sistemas solares (planetas girando alrededor de una estrella), a su vez giran alrededor de fuentes de Luz constituidas por estrellas de características lumínicas superiores a los soles comunes. Así se forman los Sistemas Estelares. Estamos hablando de Sistemas Estelares de amplia proporción, mucho más allá de las estrellas binarias o triples.
Pléyades es en realidad un Sistema Estelar de 1.404 estrellas que giran alrededor de una estrella central con propiedades lumínicas muy especiales, como veremos más adelante. De ellas, 343 son primarias, es decir de buen tamaño y alto brillo, y las restantes 1.061, que son pequeñas y de bajo brillo, las llamaremos secundarias. Muchas de las estrellas pleyadinas poseen planetas, algunas más que otras. Desde estrellas con dos planetas hasta 52 o más.
Continuando con el principio de Sistemas de Sistemas a nivel estelar, ellos son a la vez parte de otros sistemas más complejos, en los cuales los sistemas estelares son las unidades que giran alrededor de otra fuente luminosa todavía más poderosa. Los podríamos llamar Sistemas Super-estelares que, repitiendo el mismo paradigma, son parte de otro sistema todavía más complejo, que para nuestros efectos llamaremos Super-Extra-estelares. Este modelo debe repetirse varias veces para que constituya un sistema de complejidad suficiente como para girar alrededor del Sol Central de una Galaxia.
Las galaxias siguen la misma ley formando Sistemas Galácticos, Super Galácticos y así en adelante, hasta conformar un Universo pulsante que será la unidad para Sistemas de Universos, hasta llegar a constituir el Gran Universo.
EL SISTEMA DE LAS PLÉYADES
Ya estamos conceptualmente preparados para ubicarnos como Sistema Solar, dentro de la Vía Láctea.
El Sistema Solar es un sistema planetario que forma parte del Sistema Estelar de las Pléyades. De las 1404 órbitas alrededor de Alción, es la penúltima. La última es la de Alfa del Centauro que es la estrella más cercana al Sol, a solo 4.3 años-luz. 5 órbitas más hacia el centro se encuentra la estrella Sirio.
El Conjunto o Cúmulo de las Pléyades se encuentra ubicado en el centro del Sistema, donde Alción es el eje sobre el cual giran las otras 6 estrellas, como sus órbitas más cercanas. En términos generales, podemos decir que la gran mayoría de las estrellas, fácilmente distinguibles a ojo desnudo en una noche estrellada, forman parte del Sistema Pléyades. Así las estrellas que conforman los asterismos de las 88 constelaciones, son Pléyades.
El Sistema Pléyades es una de las órbitas del Sistema Super-estelar del que forma parte. Es el Sistema Polaris. Por la proximidad de esta estrella con relación al Sol, se desprende que Pléyades es una de las órbitas más cercanas a la estrella Polaris. El recorrido de Pléyades sobre la estrella Polar dura 72 millones de años terrestres.
El Sistema Polaris es parte del Sistema Neva, éste del Sistema Plera que a su vez orbita en otro Sistema mayor llamado el Sistema Psi, el que pertenece al Sistema Albor y este, por fin, orbita con otros macro-sistemas de equivalente magnitud, alrededor del Gran Sol Central de la Galaxia Vía Láctea.
Mientras nuestro planeta gira sobre sí mismo a 4.3 kilómetros por segundo, produciendo con ello los días y las noches y a su vez gira alrededor del Sol a una velocidad de 8.4 kilómetros por segundo, definiendo los años, el Sistema Solar, como un todo, gira alrededor de la estrella Alción a 39 kilómetros por segundo.
Una vuelta completa del Sistema Solar en su órbita, forma un perímetro de 3.091 años-luz que invierte un tiempo de recorrido de 24.000 años terrestres. Como sucede en el principio de Sistemas de Sistemas, dicha órbita replica la división en 12 etapas de 30º de arco que apreciamos en el zodíaco de la Tierra alrededor del Sol.
Con algunas diferencias, por supuesto. Primero: Mientras las signos zodiacales terrestres abarcan 30 días, los signos del zodíaco pleyadino son Eras de 2.000 años cada una. Segundo: Mientras el zodíaco terrestre va de izquierda a derecha, el solar circundando a Alción va en dirección opuesta, de derecha a izquierda. Como resultado, Piscis va antes de Acuario, éste precede a Capricornio y así con los demás.
Cada Era, por su posición en relación con los otros Sistemas de los que Pléyades forma parte, y sus Sistemas hermanos en la Galaxia, tiene sus propias fuerzas que los diferencian. Pero existen dos Eras (Leo y Acuario) que además de ello, están influidas por otra variable todavía más discriminante: El Anillo de Alción.
ALCIÓN Y SU ANILLO
Alción es una estrella que posee, en su composición física, características no descubiertas aún por los astrónomos. Estas cualidades de muy alta frecuencia electromagnética, cohesionan los cuerpos de tan gran número de estrellas con sus planetas y satélites. Es un fenómeno no meramente gravitacional sino de energía altamente lumínica.
La segunda propiedad de Alción, que se desprende de la anterior y que influye decisivamente en la vida de Pléyades, es la de poseer un gran anillo o cinturón compuesto por fotones que cubre el total de los 1.000 años-luz que es el diámetro del Sistema.
El Anillo es una luz tan sutil que, a la distancia, no es visible al ojo humano. Está compuesto por partículas sub-atómicas, más elementales que los electrones. Es un tipo de vibración muy ordenada, desconocida en nuestro mundo actual, pero percibida, como de gran belleza, por otros habitantes pleyadinos con mayor nivel de evolución. Su posición es fija y es perpendicular al plano de las estrellas: esto hace que cada una de ellas lo cruce dos veces en cada vuelta orbital; una vez por Leo y otra por Acuario.
Cuando un sistema solar penetra en el Anillo, la vibración de todo el sistema se eleva, trayendo cambios dimensionales que enriquecen la vida de los seres que allí habiten.
Pero, ¿qué son las dimensiones? La evolución que deviene de la Nada al Todo, se realiza en una espiral ascendente formada por escalas llamadas “dimensiones”. Una dimensión es un nivel de la escala evolutiva que se define por la frecuencia vibratoria de la luz que posee y que determina las propiedades del tiempo-espacio que la rige.
El Sistema Estelar de las Pléyades acepta ascender hasta la séptima dimensión y la Galaxia Vía Láctea como un todo admite hasta la novena. Cada mundo tiene su propia franja de dimensiones posibles. En el caso de la Tierra son 5. Nosotros, los humanos en vida material estamos en la tercera dimensión. Cuando el Sol y sus planetas ingresen en la Luz del Anillo, nuestra dimensión terrestre subirá a 3.5.
Estamos en los umbrales para penetrar en el Anillo de Alción. La Era de Acuario comenzó el 27 de julio de 1.999 y el ingreso a la Luz se iniciará en agosto del 2023. Nos encontramos en una dura etapa de purificación que es la explicación de las turbulencias que experimentamos en los diferentes aspectos de la vida actual del planeta.
Venimos de 10.000 años de vida fuera del Anillo, desde que salimos de Leo. Entrar de nuevo en este medio luminoso es el acontecimiento más importante de la historia conocida. Ello implica un cambio de gran magnitud dimensional lo que necesariamente conlleva una crisis que concluirá al entrar al Anillo.
El paso dimensional de 3 a 3.5 requiere de un proceso de elevación que paulatinamente se dará en los años que restan antes del ingreso anillal. De hecho ya comenzó a darse a partir del 5 de Mayo del 2007 y continuará con diferentes eventos que se irán presentando en el futuro cercano, como será la decadencia de todos los sistemas humanos: Económico, financiero, político, militar, religioso y social. Además del paso de un enorme planeta de la estrella Tilar, Perteneciente al conjunto estelar de Orión y que tocará, aunque muy lejos de la tierra, las orbitas planetarias de nuestro sistema solar como lo ha hecho cada 6.450 años. Este planeta es llamado Hercólubus.
Para el 2023 ya deberá haber subido el nivel vibratorio del planeta, a tal nivel que sea compatible con la frecuencia vibracional del Anillo y para el año 2050 la raza humana se habrá adaptado para vivir 2000 años de paz y gran armonía, que se dividirán en 1000 años ascendentes y 1000 descendentes que llevarán a la tierra, a su salida del anillo, a iniciar una nueva humanidad en su corteza.
Las franjas dimensionales determinan categorías en los habitantes del Sistema Pléyades. Ellas son cuatro: Los Biones que cubre seres hasta la cuarta dimensión. Los Triones y Cuatriones que pertenecen a la quinta y sexta respectivamente y los seres de los mundos Kats que vibran en séptima dimensión.
Los Biones son seres con cuerpos bastante densos, con mente atrapada por el egoísmo, con espíritus jóvenes y con una conciencia relativamente cerrada. Los hay bajos, medios y altos. Nosotros entramos en la clasificación de medios-bajos.
Los Triones son de cuerpos más sutiles que todavía mueren para luego reencarnar. Su mente abarca amplios conocimientos y han desechado todo vestigio de egoísmo. Tienen amor por sí mismos en apertura de conciencia. A partir de esta franja podemos comenzar a hablar de seres de Maestría.
Los Cuatriones son cuerpos sutiles de sexta dimensión, que ya no mueren, sino que se transforman. Sus necesidades son muy pocas y su actuar lo dedican a misiones a favor de los mundos pleyadinos que los requieren y a sus habitantes para limpiarlos de las cargas del Karma y para mostrarles los caminos que les acelerarán su propia evolución.
Los seres de los mundos Kats. Son los más elevados en el Sistema Pléyades. Viven en mundos etéreos, como vaporosos. Su condición corporal es estática; con la mente, que es muy poderosa, mueven leyes que desencadenan procesos aprovechados por los otros Maestros para su realización.
Las Pléyades poseen siete Ancianos llamados Menores (en relación con los 12 Mayores de la Galaxia) que constituyen el Consejo Supremo de este gran Sistema Estelar. Ellos son: Omoro, Matra, Amanta, Maer, Ilum, Madres y Aarón. El gran director de Pléyades es un Padre llamado Yésel. Él es la Fuerza que conduce al Sistema, acompañado de Sim, regente de la estrella Alción y de su paralelo, opuesto y complementario, cuyo nombre es Kom. Los regentes de la Hermandad Blanca Pleyadina están ubicados en los Sistemas de Sirio, de Vega y de Mira.
Así es como la Tierra es nuestra casa, el Sistema Solar es el barrio, Pléyades la ciudad en la que vivimos y la Vía Láctea el país. Así como amamos el terruño que nos vio nacer y que nos brindó sus amores para crecer y desarrollarnos, así, con una conciencia un poco más dilatada, compenetrémonos con nuestro hogar cósmico, seamos gratos con él y aprovechemos todas las oportunidades que nos brinda. Especialmente preparémonos para recibir la luz del Anillo de Alción del que podremos disfrutar en pocos años. Grandes cambios nos esperan y éste será el más maravilloso en muchas vidas.
Con mucho amor.
Raúl Yepe
CASA DE SIRIO
CASA DE MER
EL SISTEMA ESTELAR DE LAS PLÉYADES
Y
LA ESTRELLA ALCIÓN
EL CONJUNTO DE LAS PLÉYADES
En la Biblia se menciona 3 veces, lo enaltece el Mahabharata y es el lugar de origen de su cultura, en la literatura Maya. Pero son los griegos, desde la época de Homero, los que le dieron su nombre a este conjunto de estrellas que se destaca en la Constelación del Tauro. Cuenta la mitología helénica que las 7 hijas del titán Atlas y la ninfa Pléyone, fueron ascendidas al cielo por Zeus el padre de los dioses.
Ha sido tradición que en las noches estrelladas, los padres señalen a sus hijos el bello complejo pleyadino, y les enseñen que su nombre es el de “las 7 Cabritas”. La más luminosa es Alción, seguida por Atlas, Electra, Maya, Merope, Taygeta y Coele. Su extensión como “Conjunto Estelar Abierto” cubre unos 12 años-luz.
LOS SISTEMAS DE SISTEMAS
Según la astronomía sagrada que enseñan los Maestros de la Casa de Sirio-Casa de Mer, la importancia del Conjunto de las Pléyades traspasa su propia dimensión y constituye solamente “el centro” de un sistema estelar mucho mayor y de una trascendencia definitiva para la existencia humana.
Para comprender el significado del “Sistema de las Pléyades” será necesario adentrarnos primero en el principio “Sistemas de Sistemas”.
Este principio dicta: Es ley universal que todo lo que existe está compuesto de sistemas que son parte de otros sistemas más complejos, que a su vez están conformados por otros sistemas más simples. Todo es Sistemas de Sistemas, a diferentes niveles de complejidad hasta llegar al Sistema Mayor que llamamos Universo.
Un ejemplo de la vida diaria y de nuestros conocimientos actuales nos puede evidenciar este principio. Comencemos con el micro-universo intra-atómico. Partículas sub-atómicas, de diferente índole se reúnen sinérgicamente y forman un núcleo atómico mientras otras en su periferia giran a su alrededor. Su conjunción es un sistema que llamamos átomo. Los átomos se reúnen y constituyen otros sistemas más complejos que denominamos moléculas.
Demos ahora un salto y sigamos nuestra disertación en un cuerpo humano. Las moléculas forman células; las células, tejidos; los tejidos, órganos; estos, a su vez, sistemas o aparatos biológicos como el sistema nervioso o el aparato digestivo; los aparatos al unirse, con un objetivo común (como sucede con todo sistema) terminan por crear un organismo, como el humano de nuestro ejemplo.
Continuemos ahora abordando el tema desde la sociología. Los organismos humanos se conjugan en núcleos sociales elementales que son las familias. Las familias forman comunidades, estas países y el gran conglomerado humano como componente ecológico que junto a otros semejantes pero de otras índoles se reúnen en el Gran Ecosistema llamado Planeta Tierra.
Acudamos ahora a la astronomía para concluir nuestro ejemplo de “Sistemas de Sistemas”. La Tierra se asocia con otros planetas y al girar alrededor de una estrella que llamamos el Sol, forman el Sistema Solar. Y aquí viene lo novedoso de la astronomía sagrada, no descubierta aún por la astronomía científica. Una cadena de sistemas estelares es necesaria antes de llegar a ese macro-sistema que denominamos La Vía Láctea.
El hecho es que los sistemas solares (planetas girando alrededor de una estrella), a su vez giran alrededor de fuentes de Luz constituidas por estrellas de características lumínicas superiores a los soles comunes. Así se forman los Sistemas Estelares. Estamos hablando de Sistemas Estelares de amplia proporción, mucho más allá de las estrellas binarias o triples.
Pléyades es en realidad un Sistema Estelar de 1.404 estrellas que giran alrededor de una estrella central con propiedades lumínicas muy especiales, como veremos más adelante. De ellas, 343 son primarias, es decir de buen tamaño y alto brillo, y las restantes 1.061, que son pequeñas y de bajo brillo, las llamaremos secundarias. Muchas de las estrellas pleyadinas poseen planetas, algunas más que otras. Desde estrellas con dos planetas hasta 52 o más.
Continuando con el principio de Sistemas de Sistemas a nivel estelar, ellos son a la vez parte de otros sistemas más complejos, en los cuales los sistemas estelares son las unidades que giran alrededor de otra fuente luminosa todavía más poderosa. Los podríamos llamar Sistemas Super-estelares que, repitiendo el mismo paradigma, son parte de otro sistema todavía más complejo, que para nuestros efectos llamaremos Super-Extra-estelares. Este modelo debe repetirse varias veces para que constituya un sistema de complejidad suficiente como para girar alrededor del Sol Central de una Galaxia.
Las galaxias siguen la misma ley formando Sistemas Galácticos, Super Galácticos y así en adelante, hasta conformar un Universo pulsante que será la unidad para Sistemas de Universos, hasta llegar a constituir el Gran Universo.
EL SISTEMA DE LAS PLÉYADES
Ya estamos conceptualmente preparados para ubicarnos como Sistema Solar, dentro de la Vía Láctea.
El Sistema Solar es un sistema planetario que forma parte del Sistema Estelar de las Pléyades. De las 1404 órbitas alrededor de Alción, es la penúltima. La última es la de Alfa del Centauro que es la estrella más cercana al Sol, a solo 4.3 años-luz. 5 órbitas más hacia el centro se encuentra la estrella Sirio.
El Conjunto o Cúmulo de las Pléyades se encuentra ubicado en el centro del Sistema, donde Alción es el eje sobre el cual giran las otras 6 estrellas, como sus órbitas más cercanas. En términos generales, podemos decir que la gran mayoría de las estrellas, fácilmente distinguibles a ojo desnudo en una noche estrellada, forman parte del Sistema Pléyades. Así las estrellas que conforman los asterismos de las 88 constelaciones, son Pléyades.
El Sistema Pléyades es una de las órbitas del Sistema Super-estelar del que forma parte. Es el Sistema Polaris. Por la proximidad de esta estrella con relación al Sol, se desprende que Pléyades es una de las órbitas más cercanas a la estrella Polaris. El recorrido de Pléyades sobre la estrella Polar dura 72 millones de años terrestres.
El Sistema Polaris es parte del Sistema Neva, éste del Sistema Plera que a su vez orbita en otro Sistema mayor llamado el Sistema Psi, el que pertenece al Sistema Albor y este, por fin, orbita con otros macro-sistemas de equivalente magnitud, alrededor del Gran Sol Central de la Galaxia Vía Láctea.
Mientras nuestro planeta gira sobre sí mismo a 4.3 kilómetros por segundo, produciendo con ello los días y las noches y a su vez gira alrededor del Sol a una velocidad de 8.4 kilómetros por segundo, definiendo los años, el Sistema Solar, como un todo, gira alrededor de la estrella Alción a 39 kilómetros por segundo.
Una vuelta completa del Sistema Solar en su órbita, forma un perímetro de 3.091 años-luz que invierte un tiempo de recorrido de 24.000 años terrestres. Como sucede en el principio de Sistemas de Sistemas, dicha órbita replica la división en 12 etapas de 30º de arco que apreciamos en el zodíaco de la Tierra alrededor del Sol.
Con algunas diferencias, por supuesto. Primero: Mientras las signos zodiacales terrestres abarcan 30 días, los signos del zodíaco pleyadino son Eras de 2.000 años cada una. Segundo: Mientras el zodíaco terrestre va de izquierda a derecha, el solar circundando a Alción va en dirección opuesta, de derecha a izquierda. Como resultado, Piscis va antes de Acuario, éste precede a Capricornio y así con los demás.
Cada Era, por su posición en relación con los otros Sistemas de los que Pléyades forma parte, y sus Sistemas hermanos en la Galaxia, tiene sus propias fuerzas que los diferencian. Pero existen dos Eras (Leo y Acuario) que además de ello, están influidas por otra variable todavía más discriminante: El Anillo de Alción.
ALCIÓN Y SU ANILLO
Alción es una estrella que posee, en su composición física, características no descubiertas aún por los astrónomos. Estas cualidades de muy alta frecuencia electromagnética, cohesionan los cuerpos de tan gran número de estrellas con sus planetas y satélites. Es un fenómeno no meramente gravitacional sino de energía altamente lumínica.
La segunda propiedad de Alción, que se desprende de la anterior y que influye decisivamente en la vida de Pléyades, es la de poseer un gran anillo o cinturón compuesto por fotones que cubre el total de los 1.000 años-luz que es el diámetro del Sistema.
El Anillo es una luz tan sutil que, a la distancia, no es visible al ojo humano. Está compuesto por partículas sub-atómicas, más elementales que los electrones. Es un tipo de vibración muy ordenada, desconocida en nuestro mundo actual, pero percibida, como de gran belleza, por otros habitantes pleyadinos con mayor nivel de evolución. Su posición es fija y es perpendicular al plano de las estrellas: esto hace que cada una de ellas lo cruce dos veces en cada vuelta orbital; una vez por Leo y otra por Acuario.
Cuando un sistema solar penetra en el Anillo, la vibración de todo el sistema se eleva, trayendo cambios dimensionales que enriquecen la vida de los seres que allí habiten.
Pero, ¿qué son las dimensiones? La evolución que deviene de la Nada al Todo, se realiza en una espiral ascendente formada por escalas llamadas “dimensiones”. Una dimensión es un nivel de la escala evolutiva que se define por la frecuencia vibratoria de la luz que posee y que determina las propiedades del tiempo-espacio que la rige.
El Sistema Estelar de las Pléyades acepta ascender hasta la séptima dimensión y la Galaxia Vía Láctea como un todo admite hasta la novena. Cada mundo tiene su propia franja de dimensiones posibles. En el caso de la Tierra son 5. Nosotros, los humanos en vida material estamos en la tercera dimensión. Cuando el Sol y sus planetas ingresen en la Luz del Anillo, nuestra dimensión terrestre subirá a 3.5.
Estamos en los umbrales para penetrar en el Anillo de Alción. La Era de Acuario comenzó el 27 de julio de 1.999 y el ingreso a la Luz se iniciará en agosto del 2023. Nos encontramos en una dura etapa de purificación que es la explicación de las turbulencias que experimentamos en los diferentes aspectos de la vida actual del planeta.
Venimos de 10.000 años de vida fuera del Anillo, desde que salimos de Leo. Entrar de nuevo en este medio luminoso es el acontecimiento más importante de la historia conocida. Ello implica un cambio de gran magnitud dimensional lo que necesariamente conlleva una crisis que concluirá al entrar al Anillo.
El paso dimensional de 3 a 3.5 requiere de un proceso de elevación que paulatinamente se dará en los años que restan antes del ingreso anillal. De hecho ya comenzó a darse a partir del 5 de Mayo del 2007 y continuará con diferentes eventos que se irán presentando en el futuro cercano, como será la decadencia de todos los sistemas humanos: Económico, financiero, político, militar, religioso y social. Además del paso de un enorme planeta de la estrella Tilar, Perteneciente al conjunto estelar de Orión y que tocará, aunque muy lejos de la tierra, las orbitas planetarias de nuestro sistema solar como lo ha hecho cada 6.450 años. Este planeta es llamado Hercólubus.
Para el 2023 ya deberá haber subido el nivel vibratorio del planeta, a tal nivel que sea compatible con la frecuencia vibracional del Anillo y para el año 2050 la raza humana se habrá adaptado para vivir 2000 años de paz y gran armonía, que se dividirán en 1000 años ascendentes y 1000 descendentes que llevarán a la tierra, a su salida del anillo, a iniciar una nueva humanidad en su corteza.
Las franjas dimensionales determinan categorías en los habitantes del Sistema Pléyades. Ellas son cuatro: Los Biones que cubre seres hasta la cuarta dimensión. Los Triones y Cuatriones que pertenecen a la quinta y sexta respectivamente y los seres de los mundos Kats que vibran en séptima dimensión.
Los Biones son seres con cuerpos bastante densos, con mente atrapada por el egoísmo, con espíritus jóvenes y con una conciencia relativamente cerrada. Los hay bajos, medios y altos. Nosotros entramos en la clasificación de medios-bajos.
Los Triones son de cuerpos más sutiles que todavía mueren para luego reencarnar. Su mente abarca amplios conocimientos y han desechado todo vestigio de egoísmo. Tienen amor por sí mismos en apertura de conciencia. A partir de esta franja podemos comenzar a hablar de seres de Maestría.
Los Cuatriones son cuerpos sutiles de sexta dimensión, que ya no mueren, sino que se transforman. Sus necesidades son muy pocas y su actuar lo dedican a misiones a favor de los mundos pleyadinos que los requieren y a sus habitantes para limpiarlos de las cargas del Karma y para mostrarles los caminos que les acelerarán su propia evolución.
Los seres de los mundos Kats. Son los más elevados en el Sistema Pléyades. Viven en mundos etéreos, como vaporosos. Su condición corporal es estática; con la mente, que es muy poderosa, mueven leyes que desencadenan procesos aprovechados por los otros Maestros para su realización.
Las Pléyades poseen siete Ancianos llamados Menores (en relación con los 12 Mayores de la Galaxia) que constituyen el Consejo Supremo de este gran Sistema Estelar. Ellos son: Omoro, Matra, Amanta, Maer, Ilum, Madres y Aarón. El gran director de Pléyades es un Padre llamado Yésel. Él es la Fuerza que conduce al Sistema, acompañado de Sim, regente de la estrella Alción y de su paralelo, opuesto y complementario, cuyo nombre es Kom. Los regentes de la Hermandad Blanca Pleyadina están ubicados en los Sistemas de Sirio, de Vega y de Mira.
Así es como la Tierra es nuestra casa, el Sistema Solar es el barrio, Pléyades la ciudad en la que vivimos y la Vía Láctea el país. Así como amamos el terruño que nos vio nacer y que nos brindó sus amores para crecer y desarrollarnos, así, con una conciencia un poco más dilatada, compenetrémonos con nuestro hogar cósmico, seamos gratos con él y aprovechemos todas las oportunidades que nos brinda. Especialmente preparémonos para recibir la luz del Anillo de Alción del que podremos disfrutar en pocos años. Grandes cambios nos esperan y éste será el más maravilloso en muchas vidas.
Con mucho amor.
Raúl Yepe
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